Y, ¿qué es óptimo en una relación?

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Bethy Villamizar Duarte

El término de infidelidad suele usarse cuando alguien no respeta un compromiso asumido con otra persona. La infidelidad de pareja es la más popular ya que es un comportamiento típicamente humano, cómo lo es la rabia, la envidia, el amor, en fin; si  no hay una única causa que dispare una infidelidad, habitualmente, se desencadena en el desgaste de la vida de la pareja.

Hay muchas parejas que logran recuperarse tras la sucesión de una infidelidad, pero también hay otras  que no pueden recuperar la confianza en el otro y entonces terminan por disolverse. De la anterior definición tomaré tres palabras claves como lo son compromiso, desgaste de la vida de pareja, y por ultimo confianza. Lo anterior lo hago con el fin de abordar el tema de la infidelidad en un contexto económico, ya que al ver la economía desde situaciones que ocurren comúnmente en una sociedad se puede entender mejor muchos conceptos de la misma.

Bueno, se sobreentiende que para que exista una infidelidad debe haber una relación, la cual se formaliza cuando un sujeto A y un sujeto B interactúan y deciden mutuamente entablar un compromiso con unas reglas de juego que hay que cumplir para que la relación no se termine. En términos económicos, el sujeto A, ofrece complementar las necesidades afectivas del sujeto B, el cual acepta la proposición porque eso lo hace más feliz, o sea, aumenta su bienestar y también hace a la otra persona feliz, es más o menos como un óptimo de Pareto, donde se hacen transacciones mutuamente beneficiosas, donde el objetivo es aumentar su bienestar. Esto básicamente es entablar un compromiso amoroso. Bien, hasta aquí podemos decir que existe un equilibrio de mercado – o del amor.

Pero como con cualquier empresa si no se innova y se está a la vanguardia los negocios empiezan a irse en picada hasta que quiebran, o se asocian con otras organizaciones. Lo mismo ocurre en una relación, siempre va a llegar un punto donde la rutina va a empezar a jugar un papel importante en la vida de los sujetos, debido a que a hace  que se note el desgaste de la relación. Y como en toda empresa, si no se dan los incentivos necesarios para que se recupere y llegue a un punto de equilibrio nuevamente, va a empezar a decaer.

En esos momentos la relación se vuelve un mercado débil y poco rentable, pero se mantiene por X motivos que solo los dos sujetos entienden (muchas veces son los hijos los que hacen que no se de una ruptura definitiva). El hecho de que sea poco rentable lleva a que ya sea el sujeto A o el sujeto B, se den cuenta de que pueden mantener su negocio (relación) si se asocian con otras empresas que les brinden un servicio que les permita salir de  sus problemas de rutina sin necesidad de romper vínculos con ¨ la empresa principal¨  pero con la condición de que el sujeto contrario no se entere, hay empiezan a haber problemas de ineficiencia ya que no se cumple el teorema de Pareto, puesto que digamos el sujeto A mejora su bienestar pero no está teniendo en cuenta que al hacer negocios “ilícitos” (y digo ilícitos porque cuando pactaron el acuerdo o compromiso de formalizar la relación, también pusieron unas reglas que se debían seguir para que la relación funcionara y entre dichas reglas no se contemplaban asociaciones o interacciones con otras entidades)  está de una u otra manera traicionando la confianza del sujeto B, quien confió en que se respetaran las reglas del juego para que se obtuviera un máximo beneficio. Aunque la ineficiencia se ve totalmente cuando el sujeto B se entera de que literalmente lo han engañado y han jugado con su confianza, pues porque mientras este no se entere todo va a seguir igual por lo menos para el sujeto B. El sujeto A mejora, sin que el B empeore pero con la premisa de que existe falta de información por parte del sujeto B.

Viendo esto se podría decir que las relaciones formales (con restricciones o reglas) tienden a ser un mal negocio ya que con el tiempo existen factores que influyen en dicha relación y hacen que las reglas no se cumplan al pie de la letra lo que generará conflictos internos. Claro, cabe aclarar que esto no ocurre siempre ya que hay datos atípicos que demuestran que se puede vivir en armonía durante toda una vida, ya sea porque el sujeto B no se enteró de la infidelidad o porque  no tuvo la necesidad de mejorar su bienestar.

Por último, ¿Será acaso mejor optar por una relación abierta y sin compromisos, con unas reglas de juego más flexibles?

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